Todo país tiene derecho a celebrar aquellas fechas que tienen una carga simbólica relevante en su historia. Incluso cabría pensar que entre las efemérides a elegir su independencia, sus constituciones o la consecución de libertades podrían tener detractores o defensores pero no más. El hecho de que España reivindique el 12 de Octubre como su día nacional, proyecta mucho más y a peor lo que sus élites conciben como gesta, como logro, como hecho motivo de orgullo. Y es que hacer de una conquista armada, de una colonización depredadora y sangrienta, de un claro exponente imperialista, la fecha conmemorativa de referencia de su hecho nacional es cuando menos indicativo de una forma particularìsima y perversa de orgullo patrio. Los más crédulos dirán que el 12 de Octubre, como día en que las huestes de Colón ponían su nota en el continente americano, es lo más importante que ha hecho ese país en toda su historia. Triste referente que un acto protagonizado por mercaderes, sicarios de la guerra y delincuentes declarados, puede convertirse en hecho de tanto calado. Es como si los alemanes celebraran como día nacional la invasión de la antigua URSS, EEUU el reconocimiento de la esclavitud como gesta o Francia la conversión de su revolución burguesa en un régimen totalitario. El 12 de Octubre no puede ser sustraído de todas sus maldedades y convertido en una efemérides edulcorada, dulcificada y llena de bondades. Celebrar el 12 de Octubre conlleva no pedir perdón por el asesinato masivo más grande de la historia, significa robo masivo de propiedades y recursos, además de la esclavitud de millones de seres humanos.

Celebrar el 12 de Octubre no debería ser motivo de orgullo sino de vergüenza, no debería ser una alegría sino de un profunda arrepentimiento y tristeza.

Para los independentistas canarios en general y Hij@s de Canarias en particular, por clarísima convicción de que el colonialismo y el imperialismo son hechos históricos que representan una vergüenza para la humanidad, por conocimiento y muestra de repulsa a aquellos hechos y sus antecedentes en nuestro pais y finalmente por sentido de la ética y moral de lo que aún habiendo pasado hace varios siglos todavía hoy significa muerte y expolio, invitamos a todo el pueblo canario a no celebrar nada mañana, a no perdonar ni olvidar pero sobre todo a una rebeldía cívica y consciente a tal fecha negra de la historia de la humanidad.