Qué casualidad, la primera vez que lo hace un cuerpo autonómico, y es el canario, no podía ser otro.
Y ello seguramente por una realidad psicológica definida por Garrett O´Connor, médico-psiquiatra irlandés, que llamó vergüenza maligna, lo decía para el pueblo irlandés después de su independencia, pero viene a ser la conducta del pueblo canario actual y su clase política originada por el colonialismo español en Canarias.
El complejo que sentimos frente a la realidad impuesta, la autoestima baja, la falta de definición política y orgullo como pueblo, como identidad nacional, es lo que está detrás de todos los comportamientos políticos.
El Sr. D. Ángel Víctor Torres es político de perfil bajo, y ciertamente, nunca ha dignificado desde nuestra visión política la institución presidencial de Canarias, y así se refleja en su actuación, preocupado por estar en una tele para hablarnos de unas lluvias que describe con total detalle, obviamente, su perfil es más de Director General, y así Madrid gobierna el gobierno de Canarias, con un Director General.
Que los efectivos de la Policía Nacional Canaria, como la reconocemos, pues Liberación entiende a Canarias como nación, vayan a un desfile militar de los españoles, que viene a conmemorar una realidad histórica aberrante, de saqueos y crímenes, resulta un despropósito cultural y sociológico, una aberración a la dignidad de nuestros antepasados, que no son esos los prehispánicos, son nuestros antepasados, Haplotipos U6b1, los cuales siguen presentes por nuestras calles en versión siglo XXI.
Lo que se celebra, con respecto a nosotros los canarios, por si resulta que no queremos respetar a los pueblos americanos, africanos o rifeños, son las barbaridades cometidas en el pasado para la gloria de un imperio del que hoy no se retractan, pues no llegan al nivel intelectual que muchos estados europeos han acreditado recientemente al pedir disculpas por las barbaridades de su pasado colonial.
En Canarias hubo guerras discontinuas por aproximadamente noventa años, nuestros antepasados no querían que los invasores del norte entraran en su país, en su tierra, en su casa, y lucharon por su soberanía, hoy no somos tan dignos.
En esa guerra invasora, España nos hizo cosas como estas:

…colgar y empalar a la víctima, el descuartizarla, el cortarle las manos y los pies, haciendo luego correr al mutilado, el ahogar a los infieles prisioneros y esclavizar a las poblaciones indígenas … Georg Friederici. Pontificia Universidad Católica de Chile.

…y a otros muchos echavan a la mar en barcas a lo largo, atados de pies y manos y con pesgas a los pescuezos… Pontificia Universidad Católica de Chile

Sobre esclavitud, debiéramos muchos saber, y todos tener presente, el mercado de esclavos con nuestros antepasados, nuestros tatarabuelos.

Con Sevilla hubo un importante comercio de esclavos canarios, en el SXV y parte del XVI, nuestra gente se vendía en las gradas de la Catedral.

Fue tan relevante este comercio que existe un rótulo en un callejón, cerca de la antigua puerta de la Carne y cerca de los jardines de Murillo, barrio de Santa Cruz y del Alcázar, que desde el siglo XV lleva el nombre de Callejón de los Canarios.

Pero lo de Sevilla es claramente superado por el Mercado de Valencia.

La venta de esclavos canarios era casi una avalancha de guanches en el mercado levantino.

La esclavitud era legal, participada por los funcionarios, por capitanes al amparo de las cédulas reales, como ejemplos:

<<---1489, marzo 6, Valencia.-El M. R. recibe de Luis Prats, notario de la ciudad, 106 sls. 8 dns. por las 80 lbs. en que se le estimaron 4 cautivitos de Canarias: 3 hembras y un varón, de 10-3.1 años. (R. V., C. M. R., 20, fol. 163 v.)

---1491, enero1 10, Valencia.-El M. R. recibe de Bartolomé Pinós, mercader da la ciudad, 40 sls. Por las las 30 lbs. en que se le estimaron 3 cautivitos de Canarias, de 6 años; dos llamados Perico y el otro juanico. (A. R. V., C. M. R., 20,fol. 163.)>>.

Fuente: Vicenta Cortés Alonso, Facultativa del Archivo General de Indias, Sevilla, en su obra La conquista de las Islas Canarias a través de las ventas de esclavos en Valencia.

Realmente, con estas informaciones, nuestra sociedad piensa que es digno que los canarios apoyemos el 12 de octubre del españolismo?.

No aprendemos nada del rechazo que en toda América produce semejante fecha?.

La presencia de lo que podría ser nuestra guardia nacional en tal efemérides resulta una afrenta, una ignominia, y el actuar de nuestra clase política una clara estulticia sobre nuestra realidad histórica, que un pueblo siempre indolente como el canario no enfrenta.

Por tales motivos, manifestamos nuestro total rechazo a rendir pleitesía a una realidad que nos insulta, que nos veja, nos esclavizó y nos asesinó. Nada que celebrar. 

El ruido de las carcajadas pasa. La fuerza de los razonamientos queda

Concepción Arenal

Liberación. Organización política del Archipiélago de Canarias