Cinco de los seis miembros del Gabinete Científico de la Reserva de la Biosfera de Lanzarote, órgano de expertos encargados de su asesoramiento técnico y científico, han emitido lo que Somos Lanzarote considera “un demoledor dictamen” en el que ponen en entredicho la sostenibilidad del modelo territorial propuesto por la Ley del Suelo promovida por el gobierno Fernando Clavijo, que apoyan Coalición Canaria y PSOE.

El documento, tal y como se expone en el mismo, se ha redactado a raíz de una moción presentada por la organización Somos Lanzarote, que fue aprobada en el pleno del mes de julio, y que instaba a “elevar al Gabinete Científico de la Reserva el Proyecto de Ley del Suelo de Canarias con el fin de obtener una opinión experta”. A juicio de la organización transformadora, el texto deja claro que la Ley del Suelo es una amenaza para el territorio de Canarias, para la sostenibilidad del modelo de crecimiento, y que va en contra de la cultura de contención de la destrucción territorial que históricamente se ha defendido desde esta isla”.

En el informe, dado a conocer el día antes de que se reúna el consejo de la Reserva de la Biosfera para tratar esta controvertida ley, los expertos advierten de las amenazas que suponen para la reserva de la Biosfera de Lanzarote, entre los que se citan la inseguridad jurídica que produciría, la multiplicación de los procedimientos excepcionales frente al planeamiento, así como “el riesgo de expulsión de quienes realmente viven de la actividad agraria” en favor de intereses especulativos en el suelo rústico.

Para los científicos, la Ley del Suelo que pretende aprobar Coalición Canaria, con el apoyo de sus socios del PSOE, “plantea un modelo de planificación territorial que dificulta la necesaria visión global que requiere la aplicación de los principios de sostenibilidad”.

Además, advierte, “el Cabildo pierde la capacidad para planificar Lanzarote en su conjunto” al impedir a la institución desclasificar suelo urbanizable y recalificarlo como rústico a través del Plan Insular”. El Cabildo tampoco podría “fijar los criterios del modelo turístico insular”, añade.

Otra de las preocupaciones, que se suman a las manifestadas por Somos Lanzarote tanto en dicho pleno ordinario como en el debate sobre el Estado de la Isla, es la prevalencia de los proyectos excepcionales frente a la planificación del territorio.

Los peligros que acechan sobre el suelo rústico, favoreciendo el consumo de suelo, la dispersión de edificaciones en el ámbito rural, así como el uso de suelo rústico para los llamados “usos complementarios” que, aseguran “abre la puerta en la práctica a cualquier actividad”, es otra de las preocupaciones de los expertos más incisivas.

San Ginés vuelve a quedar en evidencia

Por otra parte, Somos Lanzarote ha manifestado el “ridículo” que produce observar cómo el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, intenta infravalorar un informe de tanta trascendencia para Lanzarote y para su consideración como reserva de la Biosfera, solo para realzar sin éxito un proyecto tan perjudicial para el futuro de Canarias como es la Ley del Suelo.

Y es que, al remitir a los miembros del Consejo de la Biosfera el dictamen del Gabinete, el presidente ha escrito literalmente que “les remito el siguiente documento suscrito por 5 de los 6 miembros del Gabinete Científico, que a mi modo de ver en modo alguno debe ser entendido como informe o dictamen del Gabinete en base a las siguientes consideraciones”.

La primera de las supuestas consideraciones de San Ginés es que “en una reunión mantenida el pasado mes de julio, y ante la discrepancia de pareceres, se dijo –de manera informal pero clara- que no habría un informe/dictamen del Gabinete Científico como tal, sino que los distintos miembros plantearían sus dudas y temores sobre aquellos aspectos del articulado de la Ley que ellos considerasen”.

La segunda de las consideraciones expresadas en el correo del presidente del Cabildo es que el documento que “se presenta casi 5 meses después de aquel encuentro, en vísperas de la celebración del Consejo de la Reserva de la Biosfera el próximo 1 de diciembre no ha sido suscrito por la totalidad de sus miembros”, aunque sí por cinco de los seis que en la actualidad lo forman.

Para Somos Lanzarote esta reacción sectaria es un arranque más de falta de respeto a los órganos con los que la institución cuenta, a la valía de los profesionales que suscriben y a la inteligencia de la ciudadanía de Lanzarote”.