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UPL rechaza la penosa proporción parlamentaria en que todos los partidos dejan a la Isla tras la reforma electoral y el nuevo Estatuto de Autonomía

laverdaddelanzarote.opennemas.com  |  27 de octubre de 2018 (14:20 h.)
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Unidos por Lanzarote rechaza la penosa proporción parlamentaria en que todos los partidos dejan a la Isla tras la reforma electoral y el nuevo Estatuto de Autonomía

La reforma del sistema electoral pactada por PP, PSOE y Nueva Canarias, con la vista gorda de CC, supondrá que  las 150.000 personas censadas en Lanzarote tendrán la misma representación en el Parlamento, con ocho diputados, que Fuerteventura, con 30.000 habitantes menos, y La Palma, con casi la mitad de la población de Lanzarote.

 Unidos por Lanzarote manifiesta su rotundo rechazo a la penosa y gravosa proporción parlamentaria en que todos los partidos van a dejar a la isla de Lanzarote  tras la reforma electoral incluida en el nuevo Estatuto de Autonomía de Canarias que esta semana ha sido aprobado en el Senado.

Desde la formación insularista consideran que todas las formaciones políticas con representación en el Parlamento regional se han vendido a intereses partidistas o de otra índole y han dejado a Lanzarote tirada y a los pies de los caballos al respaldar una lista de 10 diputados más  en la que nadie se ha acordado ni ha mirado para Lanzarote pues la disciplina de partido, unas veces, y muchos intereses empresariales, otras, han prevalecido entre nuestros actuales representantes en la Cámara. Todos se han vendido y han permitido que  constantemente nos humillen como pueblo y como territorio en  las paupérrimas inversiones para Educación, Sanidad o Empleo de cada año. Ahora nos mean prácticamente encima, como hace un perro cuando domina y somete a otro,  al equiparar nuestra representación en el Parlamento a la de islas con la mitad de la población que la nuestra.

Nulo ha sido el interés por Lanzarote de PP, PSOE, Nueva Canarias y Podemos y en CC solo han sabido justificarse ante sus intereses en Gran Canaria y Tenerife, además de justificar ahora la reforma después de haber hecho un paripé criticando con la boca pequeña esta reforma antes de producirse. Pero tampoco nada han reivindicado al respecto formaciones como Somos Lanzarote o los partidos vecinales de San Bartolomé, absorbidos por Coalición Canaria. Nadie espera ya nada del insularismo que predicaba tanto el  PIL, anulado actualmente por completo también por Coalición Canaria. Y poco se puede esperar de una organización en horas tan bajas como San Borondón, cuyos follones  han comenzado a raíz justamente de las negociaciones con Coalición Canaria.

A partir de ahora y, tal y como se augura ya, para los próximos 25 años, con la aprobación del nuevo Estatuto de Autonomía de Canarias y la reforma del sistema electoral, los 150.000 residentes de Lanzarote tendrán la misma representación en el Parlamento, con ocho diputados, que Fuerteventura, con 30.000 habitantes menos, y un solo parlamentario más que La Palma, con la mitad de la población que Lanzarote, con lo cual lejos de aumentar la representación bajamos porcentualmente el peso y votos de Lanzarote.

Desde Unidos por Lanzarote, única formación política que verdaderamente supone hoy en día LA RESISTENCIA  del insularismo en Lanzarote frente al sometimiento de los intereses regionales y nacionales, respaldamos la posibilidad de acabar con la actual fórmula, la que ha perpetuado a Coalición Canaria en el poder y le ha permitido ser la primera fuerza política en diputados en el Parlamento regional aun siendo la tercera en número de votos, la que ha propiciado que la papeleta de un ciudadano de El Hierro valga 17 veces más que la de un residente en Gran Canaria o Tenerife, pero no nos parece de recibo en absoluto que ninguna organización, dentro o fuera del Parlamento, haya alzado la voz para poner a Lanzarote en el lugar que se merece y dotarla, igual que va a ocurrir en el caso de la isla vecina de Fuerteventura, de un diputado más. 

Tampoco podemos entender cómo el sistema electoral de nuestra Comunidad Autónoma ha tenido que ser decidido en Madrid, en el Congreso de los Diputados y en el Senado, en lugar de que el centro del debate sobre las propias reglas de juego de nuestro sistema partiera de la máxima institución pública regional, llamada a legislar para los canarios el Parlamento de Canarias.

A partir de ahora contaremos con una Cámara con 70 diputados, de los cuales 61 estarán distribuidos entre las siete circunscripciones insulares. Ese diputado de más con respecto al sistema vigente (de 60) corresponde a Fuerteventura, isla que tenía un escaño menos que La Palma a pesar de contar con mayor población. El modelo renovado rebaja además los topes electorales para optar a un escaño, del 30 al 15% la barrera insular y del 6 al 4% la regional, aspecto que siempre hemos reivindicado desde Unidos por Lanzarote, aunque tampoco renunciamos a la necesidad de que nuestra isla se convierta –legal y económicamente es viable por completo- en una provincia con capacidad de decisión propia y sin los continuos sometimientos a que nos tienen acostumbrados los partidos estatales y mal llamados nacionalistas, como Coalición Canaria.