El pasado viernes 21 de diciembre tuvo lugar en el Centro Cívico de Arrecife el primer encuentro del grupo de ciudadanos que a través de Internet y redes sociales habían confluido previamente bajo el lema “Papagayo no se toca”, con el objetivo de coordinar acciones en contra del proyecto de degradación de las playas del sur de Lanzarote. Dicha iniciativa, planeada por el Ayuntamiento de Yaiza, que ahora ha reculado, incluía la instalación de hamacas, sombrillas, chiringuito de playa y elementos de recreo náutico en Playa Mujeres, Papagayo, dentro del Monumento Natural de los Ajaches, lo cual hubiese supuesto una agresión y un cambio de modelo para uno de los espacios de mayor valor paisajístico, ambiental y patrimonial con que cuenta Lanzarote.

La oportunidad sirvió para que los presentes expresaran su satisfacción por la victoria ciudadana que supone la paralización del proyecto de degradación de Playa Mujeres y la retirada del concurso publicado inicialmente por el Ayuntamiento de Yaiza, gracias a la acción de miles de personas que apoyaron iniciativas como la que a través de la web Change.org ha conseguido sumar más de 10 mil apoyos en un tiempo récord.

Dicha satisfacción se trasladó posteriormente al acto simbólico celebrado a mediodía de este pasado domingo día 23 en la misma cala de Playa Mujeres, en la que se exhibieron pancartas con el lema “Papagayo no se toca” como modo de festejar la victoria ciudadana. De igual manera, dado el éxito inicial de esta reivindicación, que es patrimonio común de la mayoría social de la isla, se decidió suspender la concentración prevista para el próximo sábado 29 de diciembre frente al Ayuntamiento de Yaiza, al considerase que el principal objetivo de la protesta, la retirada del concurso de las hamacas por parte del ayuntamiento, se ha logrado.

Sin embargo los presentes coincidieron en la necesidad de mantenerse alerta respecto a este proyecto en el futuro, dado que la experiencia indica que solo la actitud vigilante de la ciudadanía es garantía del éxito de una reivindicación como esta en el largo plazo. Igualmente se consensuó un compromiso activo en la defensa futura de este espacio, que el foro “Papagayo no se toca” considera de enorme rentabilidad sin necesidad de deteriorarlo con elementos propios de espacios turísticos masificados: el entorno natural singular, su valor como reclamo turístico, su no explorada productividad como espacio cultural y arqueológico hacen, en definitiva, de este espacio del sur de Lanzarote un lugar rentable siempre que se aplique criterios de responsabilidad y sostenibilidad.

Por ello se decidió mantener el contacto y programar próximos encuentros para valorar el desarrollo de este asunto en particular, así como otros frentes abiertos que pudieran suponer una agresión contra una isla que quiere encarar su futuro en clave sostenible. Igualmente, el foro ciudadano “Papagayo no se toca” destacó el apoyo recibido por esta iniciativa tanto por parte de ciudadanos de manera individual como de colectivos ya presentes en la isla, que mostraron su disponibilidad para mantener este foco ciudadano de compromiso con los valores ambientales que identifican a Lanzarote.