Transcurría el año 2003, fecha por lo tanto electoral. El colonialismo español convocaba en la colonia canaria elecciones municipales, cabildicias y parlamentarias. En el mes de febrero, el mismo en el que la monarquía medieval española se afianzó en el poder mediante un autogolpe gestionado a la perfección por los incondicionales del monarca, los generales Armada y Milán del Bosch, pues todo seguía“ atado y bien atado”, transcurría febrero, decimos y en Lanzarote a un grupo especialmente activo, el Movimiento Canario Democrático (MCD), todas las encuestas le daban representación en todas las instituciones, lo que no debería suponer ningún problema si se tratara de un sistema democrático y si el MCD no hubiera sido un movimiento soberanista y si, además, no hubiera impulsado la creación de una alternativa también soberanista en toda Canarias, la fallida Alternativa Popular Canaria, dado que Canarias es una colonia y en este caso la principal contradicción no es otra que la descolonización.

A escasos tres meses de las elecciones los servicios secretos del colonialismo no tenían tiempo que perder, por lo que organizaron una manifestación en defensa de Lanzarote e inmediatamente impulsaron lo que denominaron Alternativa Ciudadana 25 de mayo (AC 25-M), con la idea de acabar con las aspiraciones del MCD, como así ocurrió, que ni siquiera pudo presentar a sus candidatos al parlamento de Canarias, al dejar esta responsabilidad en manos de Alternativa Popular Canaria, ya infiltrada también por los servicios secretos que la vaciaron de contenido soberanista al crear lo que ahora denominaron Si Se Puede (SSP ¿no les suena?), y que quizá ellos sepan lo que quiere decir, aunque podemos intuirlo. La candidatura al parlamento del MCD nunca se presentó, con la excusa de que caducaron los plazos o los caducaron. No es casualidad que en diez legislaturas no haya salido ni un solo independentista al parlamento de Canarias, aunque para ello haya habido que elevar las barreras o topes electorales hasta el 30 por ciento en cada isla.

Algunos díscolos con la propuesta de disolver Alternativa Popular Canaria (APC) a favor de SSP se agruparon en Alternativa Nacionalista Canaria (ANC), la misma que llegó a presentar en su candidatura al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife al guardia civil Eloy Cuadra en las elecciones municipales del año 2015, muy “rojos” todos ellos y más bolivarianos que el propio Bolívar: es vox populi la construcción de millonarios chalets con las generosas donaciones del fallecido Hugo Chávez, que debió administrar más sensatamente sus petroleros caudales. El comunicado conjunto de ANC con Unidad del Pueblo (UP), publicado en algunos digitales recientemente, no tiene desperdicio, en el que incluso hablan del “status colonial” de Canarias: gran descubrimiento, oiga, después de más de 600 años de sometimiento colonial de nuestra patria, descubrimiento tan grande como el de las Américas y tan largo también: desdichadamente, ambos coincidieron en el tiempo. Se ve que ya no mola lo del izquierdismo, esa enfermedad infantil del comunismo, el palabras del mismísimo Lenin, ante la imparable conscienciación del pueblo canario.

Es conocido que a las asambleas de Alternativa ciudadana 25 de mayo asistían policías nacionales y miembros del espionaje españoles, ni más ni menos que como ha ocurrido con el 15-M.

La Alternativa ciudadana 25 de mayo se valió de conocidos militantes del independentismo canario, que llegaron a sufragar anuncios a todo color en el periódico al servicio del colonialismo La Provincia, en favor de la independencia, que ahora se dedican en cuerpo y alma a defender los frívolos puntitos del programa elaborado por los citados servicios y que luego trasladaron a SSP. La renuncia al soberanismo de AC 25-M en coalición con SSP se recoge en el siguiente extracto de su programa electoral de cara a las elecciones también de Mayo, pero en este caso del año 2007:

         “ Por lo tanto a la conclusión que hemos llegado es que en la actualidad, con el panorama político que tenemos en Canarias, con la atomización que existe en los movimientos sociales y núcleos políticos, ahora no TOCA hablar de soberanía, estratégicamente no llegamos a los ciudadanos con un programa soberanista (AC 25-M en coalición con Sí se puede)”.

Con una capacidad de convocatoria que sorprendió a propios y extraños, el denominado Movimiento 15 de Mayo, más conocido como 15-M, se gestó también con esa herramienta favorita de los servicios secretos que son las redes sociales para desarticular cualquier posibilidad revolucionaria en situaciones sociales complicadas para el poder estrablecido, como es el caso del derrocamiento de las dictaduras del Magreb (muy esclarecedor el caso del dictador  libio Khadafi con la descarada intervención de la OTAN), antes de que los acontecimientos devinieran incontrolables o situaciones como la que actualmente ocurre en España, con un índice de paro por encima del veinte por ciento de la población activa, que afecta a más de cinco millones de personas en su empleo y a muchas más en el caso de que tengan cargas familiares, desempleo que en Canarias, por qué será, llegó hasta el 34 por ciento.

Más actual es la breve historia del CDTN, intento de versión canaria del CNI o servicios secretos metropolitanos, surgida a raíz de las elecciones del 2015 con la vieja fábula de la abstención, para regocijo de colonialistas y esbirros a su servicio. A su frente se puso un experimentado y conocidísimo “luchador”, militante de todas y cada una y más de las organizaciones canarias.

Al ser “insuficiente” la maraña de siglas surgió a continuación el intento de resucitar las del MLNC, por supuesto, en línea con la posición abstencionista del CDTN y con los mismos personajes.

Lo que subyace a esta endiablada parafernalia no es otra cosa que los desesperados intentos del criminal colonialismo español para mantener cautivo al pueblo canario, pueblo que esta descubriendo a todo velocidad el verdadero sendero para su emancipación nacional, la descolonización de nuestra patria y la democratización de la misma.

Zaida Izquierdo, Argel 4 de septiembre de 2018