Doña Asunción es una leonesa de natura, la menor de cuatro hermanos, nacida fruto de la unión del secretario y la maestra del pueblo, que le inculcó el amor por la docencia, y a la que ayudaba desde la tierna edad de diez años, a dar clase a sus más de ochenta alumnas, en la bella ribera de Vegas del Condado. Estudió el bachiller en León, en el que le tocó afrontar la dura reforma educativa del Plan de Estudios de Bachillerato de 1934, que aumentaba su duración, pasando de seis a siete años, e imponiendo una reválida en el último curso que superó meritoriamente.

    Maestra desde 1945, realizó prácticas cerca de Riaño, en León, obteniendo su primer destino en Portilla de la Reina, en los Picos de Europa, desde el que se trasladaría a vivir en Vigo, antes de llegar, finalmente, a Lanzarote para ejercer durante muchos años en el centro educativo conocido como El Grupo, el Generalísimo Franco, el actual La Destila, en Arrecife, en el que la palmera que plantó a su llegada, en la esquina de la calle Duende, aún se yergue majestuosa.

      Además, de enseñante avezada y diligente, fue también una maestra cercana, además de ser la pionera de Arrecife en realizar viajes con los alumnos, inaugurándolos con un trayecto  magnífico, e inesperado para muchos, a La Palma. No solamente se viajó por las islas, sino también a destinos lejanos en esos momentos como Galicia o Ceuta, a los cuales, la mayoría de los jóvenes acudieron por primera vez.