El tema que voy a tratar a continuación es un poco espinoso, puesto que trata de una comunidad extrajera muy importante en Venezuela y que estuvo su destino ligado a los procesos y transformaciones del continente Americano.
Cuando empezó a gestarse el movimiento independentista venezolano en el año 1741 debido a las revueltas en San Felipe, Yaracuy. Se tenía claro que Canarias no era parte de España sino que era un territorio africano oprimido bajo la misma bota que los pueblos americanos. De ahí que el movimiento independentista de Venezuela se nutriera de miles de isleños descontentos con la Metrópoli Española. El 5 de julio de 1811 se firmó la Declaración de la Independencia de Venezuela (entre los firmantes se encontraba un canario, José Luis Cabrera) y se proclamó la independencia de Venezuela lo que llevó al estallido de la "rebelión de los isleños" en ese mismo año. Cabe destacar que en Caracas el ayuntamiento y el tribunal de la policía estaban ocupados por canarios a favor de la independencia de Venezuela los cuales figuran; Casiano Medranda, Pedro Eduardo, José Melo Navarrete, Onofre y Rodulfo Vassallo y Matías Sopranis ocuparon el puesto de regidor mientras que Domingo Ascanio era Corregidor y Onofre Vasallo era diputado en el Congreso de Angostura.
Entre estos líderes cabe destacar la ascendencia canaria de Francisco de Miranda y Simón Bolívar. En pocas palabras, los canarios contribuimos a la liberación de todo el Continente Americano. Pero también hubieron canarios que por múltiples razones no estaban a favor de la independencia de Venezuela, lo que se tradujo en el estallido de la rebelión de los isleños o la rebelión de la sabana del Teque. Dicho alzamiento. Fue objeto de la manipulación y represión ejercida por la Junta que representaba los intereses de Fernando VII la cual dió alas a que 70 canarios se alzaran a caballo y con trabucos contra la Primera República, llegando incluso a entrar a los domicilios particulares para violentar, robar y asesinar a sangre fría a sus moradores llegando incluso a descuartizarlos y a esparcir sus restos por la ciudad. Pero este episodio no fue el primero ni el último, Fernando VII era consciente de la unidad, hermandad y complicidad entre canarios y venezolanos, también el monarca español era consciente de que la correlación de fuerzas para la "Armada Invencible" era muy inferior ya que el movimiento independentista venezolano logró agrupar en su proyecto a los canarios, venezolanos y demás no españoles y además contaba con las simpatías de Francia, Inglaterra, Estados Unidos y Curaçao. De ahí que Fernando VII intentase por todos los medios dividir a los canarios y venezolanos como ya ocurrió en canarias el año 1678 ya que la población Canaria, berberisca y Negra era mayoritaria y de ahí que se aprobase la real cédula 1678 por la que con cada 100 toneladas de mercancías que entrasen en los puertos canarios se tenía que deportar a 5 familias Canarias a las colonias españolas en América, la política funcionó y evitó una insurrección independentista canario-berberisca y negra en Canarias.
Lo que le dió ventaja al colonialismo español fue un hecho que logró darle más peso a las fuerzas realistas el cual fue el terremoto de 1812, el terremoto de 8,0 según la escala de Richter afectó a los estados de Miranda, Táchira, Yaracuy, Mérida y al Distrito Capital (Caracas), destrozó varios cuarteles de las fuerzas republicanas matando a sus militares y logró causar un duro golpe al movimiento republicano, ocasión idónea utilizada por Fernando VII, el arzobispo(máxima autoridad eclesiástica en Venezuela) Narciso Coll y Prat y el jefe de las Fuerzas Realistas en Venezuela Domingo de Monteverde los cuales a través de una campaña informativa masiva contra la República alegando que el terremoto fue un castigo de Dios por haber traicionado a la corona española logró jugar con los sentimientos de la gente que era analfabeta y tenía su alma en manos de Dios y la Iglesia católica lo que llevó a que el apoyo a la independencia se redujera considerablemente.
Varios canarios se pasaron al bando realista y empezaron a cometer masacres contra los partidarios de la independencia emulando así a la rebelión de los isleños y a los conquistadores castellanos del año 1492, lo que llevó a Simón Bolívar a tener que luchar no sólo contra las fuerzas españolas sino contra los isleños que se pasaron al bando realista, de ahí que Simón Bolívar matase a los canarios que eran realistas.
A pesar de este episodio negro en las relaciones Canarias-Venezuela. Lo cierto es que el mismo Simón Bolívar durante la Cumbre de Panamá celebrada en 1826, abogó por las independencias de Cuba, Puerto Rico, Filipinas y Canarias alegando que; respecto a las Islas de Cuba y Puerto Rico, y en caso que se acordase su emancipación. Resolver sobre su destino futuro. Si deberán agregarse a alguna de las nuevas repúblicas o dejar que se concluyeran independientes. Resolver si las mismas medidas deberían adoptarse respecto de las otras COLONIAS de España, las Islas Canarias y Filipinas. También en referencia a Canarias, el general Pedro Briceño en una carta fechada el 12 de abril de 1826 dirigida a Simón Bolívar le hizo saber que; es indudable que en el momento en que podamos destruir la escuadra española que cubre Cuba, damos la libertad a aquella Isla, a Puerto Rico y a las Canarias que desean ser también americanas. De hecho un informe confidencial del embajador británico en Panamá evidenciaba que había un sentimiento independentista mayoritario en Canarias y que México y la Gran Colombia estaban organizando un Ejército Libertador para atacarla.
Libro: Los Canarios en la Independencia de Venezuela.
Autor Manuel Hernández González.