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Y ahora el tabaco (recordando a Angelito "Rubio")

| 30 de noviembre de 2012

Hoy quería hablar sobre el tabaco, la industria que fue uno de los pilares de nuestra economía hasta hace muy pocas décadas. Del diario de Colón extraemos esto que escribió: “Encontramos a un hombre en una canoa que se dirigía de Santa María a Fernandía. Llevaba algunas hojas secas que son muy apreciadas, algunas de las cuales me fueron traídas a San Salvador”.

Hoy quería hablar sobre el tabaco, la industria que fue uno de los pilares de nuestra economía hasta hace muy pocas décadas. Del diario de Colón extraemos esto que escribió: “Encontramos a un hombre en una canoa que se dirigía de Santa María a Fernandía. Llevaba algunas hojas secas que son muy apreciadas, algunas de las cuales me fueron traídas a San Salvador”. Diario de Cristóbal Colón, 15 de octubre de 1492.

Se refería el marino a la planta del tabaco. En algunos de los apuntes parece ser que un nativo isleño cubano enseñó el arte de manufacturar tabaco a un guanche de la isla de Chinet que había ido con Colón en uno de sus viajes. Sabemos que la Inquisición española llegó a sentenciar a gente que a la vuelta de América se le sorprendió fumando al considerar que esta costumbre era “una fiesta para el Maligno”.

Se sabe que los aventureros españoles en su desembarco en Méjico vieron a los indígenas fumándose sus buenos tabacos a la vez de los grabados que dejaron los aztecas mil años antes de Cristo.

Yo fumo igual que los indios Arawak y una costumbre tan antigua va a ser difícil erradicar, con esto no estoy invitando a la gente a fumar, cada uno es dueño de hacer lo que crea conveniente.

Y volviendo a Canarias y haciendo un repaso de su historia debemos decir que durante el periodo colonial muchos emigrantes canarios se establecieron en Las Vegas Cubanas donde perfeccionaron el cultivo y manufacturación de la hoja del tabaco. En ese periodo más de 120.000 canarios se instalaron allá donde desarrollaron el cultivo del tabaco. Tras la independencia de Cuba la mayoría de canarios regresó a nuestro país y en su mayoría siguieron trabajando en el tabaco y poco a poco convirtiendo a nuestro país en uno de los mayores fabricantes de tabaco del mundo.

Hoy, don Gregorio Socorro y su hijo están reconocidos a nivel mundial como especialistas en el proceso de manufacturación del tabaco y siendo en Cuba donde se les reconocen como una auténtica autoridad en la materia.

Hoy en día vemos cómo este cultivo fenece, como la mayoría. Aún recuerdo cómo en esta isla se pagaba a los agricultores diferentes cantidades  para dejar de plantar y producir tabaco. Quiero resaltar que a mediados de los años 70 irrumpe con fuerza el Movimiento por la Autodeterminación e Independencia del Archipiélago Canario (Mpaiac). Se había culpado a un delincuente isleño de la desaparición del industrial tabaquero canario Eufemiano Fuentes. Parece ser que este industrial se había negado a ceder sus intereses tabaqueros a favor de empresas foráneas. La búsqueda y persecución de Ángel Cabrera, “el Rubio”, hizo que decenas de miembros de la policía española se trasladaran hasta la isla de Tamarant y comenzaran un peinado y búsqueda propio de una película de aventuras por toda le geografía isleña.

Llegando a oídas de la Comandancia Suprema de dicho movimiento la situación en que se encontraba el perseguido no dudaron en prestarle su apoyo. Como todos saben, la sede del Movimiento se encontraba en la ciudad de Argel, desde donde se dio la orden de socorro del presunto delincuente canario a través de La Voz de Canarias Libre para que se le sacara de la isla de Tamarant. Esta es la orden que se dio a través de la emisora: “Uksad Imahal (Atención, comunicado: Atención, Taburiente y Maninidra, esperen a que el guirre cante, cojan a la salema y métanla en el arguín. Ahul).

Yo no acuso a nadie, la historia está ahí, pero qué casualidad, poco tiempo después toda la industria, casi en su totalidad, desapareció.

Hoy creo que la casa del industrial tabaquero Eufemiano Fuentes está en venta en Las Meleguinas, en Santa Brígida. Se vendía en unos ocho millones de euros. Digo yo que el que pueda pagar una hipoteca de 35.507 euros mensuales se la puede quedar, no sé… apretándose un poco el cinturón, haciendo un esfuerzo. ..

Esta es la triste historia de otra industria canaria desaparecida, que si hubiéramos sido un país libre e independiente hubiera salido adelante como en otros países soberanos ocurre. Lo voy a tener que repetir: sin soberanía solo hay frustración.

¡Viva Canarias libre e independiente!

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