En la noche de ayer, domingo 11 de enero, BENTONIO OJEDA HERRERA, gran amigo de esta humilde casa, perdía su última batalla con la muerte, a la que había burlado en varias ocasiones en los últimos años. Con él se apaga la voz de uno de los grandes defensores y luchadores por la consecución de la SOBERANÍA CANARIA.
El pasado sábado a las 6 de la mañana, el incombustible Bentonio Ojeda sufría un infarto (uno más) por espacio de unos 40 minutos. Pero en esta ocasión, la suerte no estaba de su lado, quedando en estado de muerte cerebral. Hasta que en la noche del domingo se certificó su defunción.
Tal y como era su voluntad, sus órganos fueron donados. Sobre las 19 horas de hoy lunes, su cuerpo será incinerado en el tanatorio viejo de Las Torres.