"No nos fiamos ni del Ayuntamiento de Arrecife ni del Gobierno Canario". Así de contundentes se han mostrado las asociaciones de Vecinos de Valterra y de Titerroy, en relación a la información de que "el Ministerio de Fomento no cumplirá con la rehabilitación de las casas afectadas" en ambos barrios. Después de criticar que la todavía consejera Inés Rojas, y el Alcalde Manolo Fajardo "no han dado la cara con los vecinos", han decidido viajar a Madrid para reunirse con los responsables del Ministerio de Fomento.

La Asociación Vecinal de Valterra (ASVEVA) ha remitido un escrito al concejal de Festejos del Ayuntamiento de Arrecife, Víctor Sanginés, denunciando la "tapadera" que han significado las Fiestas en dicho barrio.

La Asociación Vecinal de Valterra considera que la gestión que en estos momentos está realizando en las instalaciones deportivas de la capital, Lude Gestiones y Servicios,  no es todo lo seria que debiera. "Con estas formas de proceder podemos considerar que se están burlando del pueblo; los ciudadanos para estos empresarios y políticos somos un cero a la izquierda: Lude como se puede comprobar no  cumple  con las obligaciones legales que debe tener como empresa".

La Asociación de Vecinos de Titerroy y la Asociación "Mesa Negociadora por las viviendas de Garavilla, Rocar y Ojeda", han remitido una carta al Presidente del Gobierno autónomo, Paulino Rivero, exigiéndole "una reunión urgente con los vecinos afectados" por las casas "apuntaladas" de ambos barrios. Asimismo han mostrado su malestar con la todavía consejera de Vivienda, Inés Rojas, a la que acusan de "tener ignorados a los vecinos afectados, que son personas mayores y viven con SUS CASAS APUNTALADAS en Titerroy".

Nueve colectivos sociales del Barrio de Valterra, agrupados en la Plataforma "Unificación Vecinal de Valterra", han denunciado que el Ayuntamiento de Arrecife les ha negado en los últimos 8 meses "el poder disfrutar del Centro Socio-Cultural" de dicho barrio, dándole opción sin embargo a otras asociaciones de dudosa legalidad. Para los denunciantes, esta circunstancia es "un gravísimo atropello y un desmedido abuso de autoridad" del grupo de gobierno capitalino, que no ha respondido a las quejas de los vecinos de Valterra. Máxime cuando los propios vecinos no tienen la llave del local.